Mientras viajan a través del país, Ray (Worthington), su mujer y su hija hacen una parada en una zona de descanso y la niña tropieza, rompiéndose el brazo. Los tres ponen rumbo al hospital y, tras varias horas de trayecto, por fin logran que su hija sea atendida. Agotado, Ray se queda dormido esperando a los resultados sobre la gravedad de las lesiones. Cuando despierta, nadie del hospital recuerda haber visto a su familia, ni existen datos de que alguna vez hayan ingresado en él... (FILMAFFINITY)