Los duques y la compañía de viajes a Hollywood venden algunas grabaciones musicales con el fin de recaudar dinero para construir un nuevo hospital en el condado de Hazzard. Sin embargo, cuando se roban el dinero y sus grabaciones, terminan en la carrera de misteriosos asesinos a sueldo, productores de discos de mala calidad, mafiosos rusos y usureros despiadados.