A finales del siglo XIX, en Nueva York, Peter Lake (Colin Farrell), un ladrón irlandés, conoce a Beverly Penn (Jessica Brown Findlay), la joven heredera de la casa que pretende robar. Se trata de una historia de fantasía sobre un ladrón, una chica moribunda y un caballo blanco volador. Está ambientada en el siglo XIX y en la actualidad.