En los años más oscuros de la edad media una lluvia de meteoritos cae sobre la tierra. Algunos explotan, pero otros quedan intactos. Al poco tiempo, de su interior surge una estirpe de dragones más terrible y peligrosa que jamás conoció el ser humano. Los dragones sedientos de sangre y destrucción, atacan las tierras del malvado Rey Fastrad. Aterrado por la violencia de los dragones, Fastrad abandona el reino en compañía de sus fieles y pide asilo a los dominios del Rey Wesnesbury, su eterno enemigo. Ambos reyes, adversarios hasta ese momento, deciden unir sus fuerzas para luchar contra los terribles dragones. Silas, un joven y valiente guerrero, será el encargado de hacerles frente.