Narra la historia de Walter (Andrew J. West), un joven que cree que es el hijo de Dios. Debido a ello, piensa que es el responsable del destino de todos los que se encuentra, una tarea demasiado pesada si ha de compaginarla con sus obligaciones laborales, su relación con su cariñosa pero neurótica madre y su creciente afecto por una persona que trabaja con él. Su existencia se complica aún más cuando aparece una misteriosa figura que le obliga a examinar el verdadero sentido de la vida.
A ticket-taker at the local cinema believes he is the son of God. He has agreed to decide the eternal fate of everyone he comes in to contact with.