En el 411 dC, Pendragon cuenta la historia de Artos,un joven que se niega a creer que Dios tiene un propósito para cada día. Cuando mataron a su familia,a el se lo llevaron como esclavo los sajones, Artos las preguntas de su Dios. Avanzando a través de las filas militares, Artos empieza a comprender que la visión de su padre no se basaba en la fuerza del hombre, pero si en el plan de Dios. Otra traición por sus fuerzas de los amigos de Artos de decidir entre seguir el plan de Dios hasta la muerte o el abandono de ciertos Dios para salvar su propia vida.