Terry Lennox aterriza en el ático de Philip Marlowe una buena noche de verano, y le pide a su amigo que le acompañe hasta la frontera con México para cambiar de aires. Él lo hace sin pedir explicaciones, pero al regresar a casa se encuentra con que la policía se las pide a él de mala manera. Marlowe termina entre rejas acusado de complicidad en un asesinato -la mujer de Terry ha aparecido brutalmente apaleada-, y le sueltan cuando las autoridades del pueblecito de Otatoclan informan del suicidio de Lennox.