En la Berlín arrasada de la post-guerra, el oficial norteamericano Steve Arnold somete a extenuantes interrogatorios a un hombre muy particular: Wilhelm Furtwangler, el conductor de la Filarmónica de Berlín durante el régimen de Hitler, el hombre que dice no haber sido nazi, pero que, sin embargo, nunca intentó salir de Alemania.
¿Era Furtwangler un propagandista del régimen, como lo fuera la polémica Leni Riefenstahl? ¿O simplemente un hombre apolítico, intentando ser fiel a su vocación y a su música? Estas son las preguntas que giran en este drama de época, basado en una obra teatral de Ronald Harwood (El Pianista).