Owen Wilson interpreta a Jack Ryan, un surfista timador que viaja a Hawai esperando que el cambio de escenario le traiga suerte. Allí, en la costa norte de Oahu conoce a un juez llamado Walter Crewes (Morgan Freeman) que le ofrece la oportunidad de trabajar para él sin meterse en problemas. Aunque pronto descubrirá que la tentación está por todas partes.