Obra maestra en la que intervino gran parte del talento de la Warner de la época: Howard Hawks en la dirección, Franz Waxman compuso la banda sonora, Sid Hickox en la fotografía y el dúo Faulkner-Furthman adaptando a Hemingway. Pero no sólo estos genios se consagraron: una jovencísima y sensual Lauren Bacall le dijo a Bogart: "Si me necesitas, silba"... y le enamoró. De paso, también a millones de espectadores que, al igual que sus protagonistas, vivían en plena II Guerra Mundial. Resumiendo: un clásico imprescindible del cine negro para ver en sesión continua con "El sueño eterno". (Pablo Kurt: