Historia sobre el tráfico ilegal de diamantes. En 1999, Sierra Leona vive una terrible guerra civil. Un contrabandista (DiCaprio) especializado en la venta de piedras preciosas, cuyos beneficios sirven para financiar tanto a los rebeldes como al gobierno, conoce a un pescador nativo (Djimon Hounsou) que enterró un enorme diamante cuando trabajaba como esclavo para los rebeldes.