Tras el éxito de las varias secuelas de PainKiller, aparece una nueva entrega, aunque en esta ocasión es una precuela y su protagonista es muy diferente: el anterior encargado de recolectar almas, Belial Básicamente es el mismo juego con un protagonista muy diferente ya que Belial es un demonio y, por lo tanto, sus armas son también distintas. Escopetas totalmente moldeadas al estilo infernal, poderes que acaban con tus enemigos de maneras poco agradables y un largo etcétera de opciones que, de nuevo, pone a PainKiller entre los juegos más “gore” del mercado. PainKiller: Overdose vuelve a utilizar el mismo motor gráfico que el juego original y esto supone un pequeño problema, ya que se le notan síntomas de estar anticuado. El resultado es que los modelos no están todo lo definidos que deberían y, los decorados cuentan con texturas bastante simples. Para terminar, el sonido vuelve a contar con una banda sonora ubicada en el género del “Hard Rock”, muy acorde con la temática de este título.