Al morir su padre, Mariana Villarreal queda a merced de su cruel madrastra que se apodera de su hacienda. La chica, que se ha criado como una salvaje, huye a la capital donde es rescatada por un bondadoso sacerdote que se la encarga al millonario Don Alberto.Este encuentra una satisfacción en su vida al ayudar y educar a la joven. Don Alberto sufre por la irresponsabilidad y cinismo de Luis Alberto, su único hijo. El mujeriego Luis Alberto intenta cortejar a la linda Mariana, pero su padre se lo prohibe terminantemente. Esther, prima de Luis Alberto, viene a vivir con sus tíos quienes esperan que su hijo se case con la joven y deje en paz a Mariana. Sin embargo, Luis Alberto prefiere la frescura y sinceridad de la recogida antes que la vanidad de su prima. Luis Alberto se regenera por amor a Mariana y ella, en recompensa, corresponde a su amor, pero Esther anuncia que su primo la ha embarazado.